De cómo la gestión de la cultura en los Ayuntamientos tiene que cambiar.
Actualmente pueden haber compañías que hayan realizado veinte bolos en el trimestre pasado y a la fecha no haber cobrado aún ninguno, si tenemos en cuenta que entre el IRPF trimestral, las nominas de empleados, dietas, desplazamientos y alojamientos, todo se paga antes de cobrar, y que la demora en el pago por parte de un ayuntamiento puede alcanzar los dos años, las cuentas no salen o existe un cambio financiero o el teatro y la cultura no podrán subsistir.
Las Compañías están haciendo grandes esfuerzos "Aquello de renovarse o morir ", montajes sin apenas escenografía, por no llevar técnicos y así ahorrar costes, reducción de actores para bajar cahes e inclusive asumiendo todos los riesgos y realizando contratación a taquilla.
Muchos son los que también están optando por ampliar sus servicios. Si antes no actuaban en hoteles, ahora si lo hacen, además si pueden imparten talleres, otros han optado por el teatro infantil y así poder optar a las campañas escolares e inclusive los hay que han regresado al formato de café-teatro para poder actuar en espacios diferentes.
Si es cierto que hay que "Reinventarse, no queda otra", echar mano de la iniciativa pasa por "Trabajar más y cobrar menos" pero también es cierto que la solución pasa por empezar a gestionar correctamente sabiendo redireccionar los gastos de "Cultura" en los propios ayuntamientos, no es posible que sólo una de las partes asuma riesgos y que "la crisis" pase por dejar en la miseria a un sector que ya de por si siempre está en crisis.
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